Higiene electromagnética en el hogar: la cocina

Electromagnetic Hygiene at Home: The Kitchen

La electropolución es un agente invisible presente en todos los hogares y nos está dañando, a nuestros electrodomésticos y a nuestros espacios de muchas maneras sin que sepamos cuál es el origen del problema. ¿Cómo saber si vives en un hogar saludable desde el punto de vista de la contaminación electromagnética?

La contaminación electromagnética está en todas partes, incluido tu hogar. Esta toxina ambiental es generada por las telecomunicaciones, las señales inalámbricas, tus electrodomésticos y la electricidad que los alimenta. Según estudios científicos, este tipo de contaminación está llena de interferencias que afectan nuestra salud (y la de todas las especies vivas), la calidad de nuestros espacios, nuestros dispositivos e incluso la calidad de las señales inalámbricas que usamos a diario.

A lo que llamamos higiene electromagnética se refiere a cuidar verdaderamente la sanidad de tus espacios desde el punto de vista de la contaminación electromagnética. Esta sanidad implica conocer cuáles son las principales fuentes que generan este tipo de contaminación, cuáles son los espacios más expuestos, los habitantes más vulnerables y cuáles son las medidas correctivas que debes tomar para minimizar el impacto de esta contaminación en tu hogar.

Por supuesto, los niveles de emisión varían en cada hogar, ya que hay diversos aspectos a considerar que no solo dependen del interior, sino también del exterior y de los alrededores. Pero, dado que no es posible hacer una evaluación global de las millones de condiciones posibles en cada hogar, nos centraremos en aquellos aspectos controlables en el interior de tu vivienda.

Basándonos en las tendencias actuales en hogares, arquitectura y electrónica, y también en aquellos aspectos controlables y medibles dentro de un hogar común, hemos realizado una selección de los 3 espacios principales que debes cuidar para lograr una higiene electromagnética óptima y te ofrecemos nuestras sugerencias sobre cómo controlar las emisiones en esos espacios mediante acciones simples y soluciones de filtrado SPIRO®.


Cocina

Nuestras cocinas son el lugar más contaminado de nuestro hogar en términos de electropolución. Las cocinas suelen ser los espacios con la mayor concentración de electrodomésticos funcionando simultáneamente, y generalmente se trata de los dispositivos electrónicos que demandan la mayor cantidad de energía para operar. Debes tener en cuenta que estas emisiones de CEM en la cocina no solo afectan tu salud y la durabilidad de tus electrodomésticos, sino que también afectan la preservación y calidad de tus alimentos.

Al evaluar las emisiones de contaminación electromagnética en la cocina, hay algunos factores adicionales importantes a considerar: ¿con qué frecuencia se usan los electrodomésticos? ¿Durante cuánto tiempo se utilizan? ¿Qué antigüedad tienen? ¿Son dispositivos inteligentes? ¿Están siempre conectados? Aunque en la cocina hay muchos aparatos, muchos de ellos se usan de forma intermitente y durante períodos cortos, lo que influye en el nivel de exposición que reciben los habitantes del hogar. Otros aparatos son de diferentes generaciones, y otros son inteligentes y están conectados mediante señales inalámbricas, lo cual también marca una diferencia en las emisiones.

Por ejemplo, un horno eléctrico no es lo mismo que uno a gas. Los hornos y estufas eléctricos, debido a su funcionamiento, generan un campo eléctrico significativamente mayor alrededor de ellos. Por ejemplo, si pasas de 2 a 3 horas frente a una estufa eléctrica, recibirás una exposición bastante significativa al campo eléctrico. Pero si tu compañero de piso la utiliza de forma intermitente y solo durante unos pocos minutos, el nivel de exposición que recibe es considerablemente menor.

Luego tenemos el horno microondas. Este ha sido objeto de mucho debate: ¿cuál es el daño que causa el horno microondas? Pero también hay un factor muy importante: ¿para qué usas el horno microondas? Algunas personas dicen comúnmente que lo utilizan para almacenar alimentos que no necesitan refrigerar. "Solo lo guardo, no lo uso, ¿entonces sigue dañándome de la misma manera?" La respuesta es no.

Es un electrodoméstico que está enchufado y se alimenta de electricidad para mostrarte la hora en un pequeño reloj, pero el magnetrón (el dispositivo que emite la radiación de microondas para calentar los alimentos) no está funcionando. Así que, mientras el magnetrón no esté en funcionamiento, el impacto es bastante pequeño. Pero considera que esto cambia drásticamente una vez que lo enciendes, ya que el horno microondas puede ser uno de los aparatos que consume más energía y emite mayores niveles de radiación cuando está operando.

Justo después del horno microondas, tenemos el refrigerador. Los refrigeradores están siempre encendidos, siempre consumiendo y siempre emitiendo. Hoy en día, con la modernización de los electrodomésticos, los refrigeradores se han convertido gradualmente en el principal contaminante electromagnético de la cocina, ya que también utilizan sensores avanzados, grandes pantallas táctiles e incluso señales inalámbricas, lo que añade emisiones de alta frecuencia al ya elevado consumo eléctrico.

También hay otros dispositivos pequeños en tu cocina, como cafeteras, tostadoras y licuadoras. Todos ellos emiten CEM y, aunque su uso puede ser muy intermitente y sus emisiones significativamente menores, suman a las emisiones de los otros electrodomésticos más grandes que hay en la zona.

Nuestra sugerencia

  • Primero que nada: Si no estás utilizando alguno de tus dispositivos electrónicos de la cocina en ese momento, es mejor mantenerlo desconectado hasta que lo necesites. Recuerda que los aparatos conectados, aunque no estén encendidos, mantienen una carga en reposo y un campo eléctrico alrededor del cable.
  • Si deseas filtrar las emisiones de tus electrodomésticos de la cocina, recomendamos usar tres soluciones:
    1. Un SPIRO® SQUARE debajo del horno microondas para filtrar sus emisiones.
    2. Un SPIRO® DISC en el refrigerador o incluso dentro de él para preservar la calidad de los alimentos y filtrar las emisiones circundantes.
    3. Al menos un filtro STROOM MASTER® para controlar la electricidad sucia en la cocina.

Esta estrategia te ayudará a mitigar la contaminación electromagnética en la cocina, protegiendo tu salud, preservando la integridad y durabilidad de tus electrodomésticos, y garantizando la calidad de tus alimentos.